Esta tarde he ido al Fnac a mirar un par de regalos de Navidad y me he encontrado con un libro bastante peculiar del que ya había oído hablar, el de "Contes de bona nit per a nenes rebels: 100 històries de dones extraòrdinaries".
Cuando descubrí por primera vez este libro me pareció una maravilla, sabía que estaban las historias de Frida Kahlo, Ada Lovelace y Hipatia de Alejandría entre otras muchas más mujeres y me pareció una extraordinaria idea para dar a conocer a las niñas cientos de referentes femeninos en el campo de la literatura, ciencia, política y el arte; teniendo en cuenta que la mayoría de estas figuras femeninas han estado y siguen estado invisibilizadas.
Cuál fue mi sorpresa cuando ojeando el libro me encontré con precisamente dos historias dedicadas a Hillary Clinton y Margaret Thatcher. Ya me había chirriado bastante ver a Coco Chanel entre todas esas mujeres, teniendo en cuenta que colaboró con la Gestapo durante la ocupación alemana en Francia durante la II Guerra Mundial, pero estas dos figuras fueron la gota que colmó el vaso y quienes me hicieran tomar una actitud bastante crítica con este libro.
Se supone que es un libro dedicado a las niñas para que descubran a mujeres extraordinárias, mujeres que han contribuido beneficiosamente a la sociedad con sus actos, mujeres que son ejemplos a seguir y que pueden tomar como referentes, y en cambio, entre sus páginas se encuentran dos imperialistas neoliberales responsables de bastantes muertes.
Empezaré hablando de Hillary Clinton, teniendo en cuenta que hasta el año pasado estuvo en la boca de todos a causa de las elecciones estadounidenses y que bastantes medios la presentaron como la alternativa sensata y feminista a Donald Trump.
¿Diferencias entre Trump y Clinton? En lo que tiene que ver con su defensa al sistema capitalista y al imperialismo estadounidense no hay mucha diferencia entre ambos. ¿Imperialista? Mucha gente ignoró, y sigue ignorando, el hecho de que Clinton mientras ocupó el cargo de secretaria de Estado para la administración de Obama profundizó la Iniciativa Mérida, programa de asistencia financiera y asesoramiento para las fuerzas represivas en México. Con dichos fondos, dio apoyo a la conocida como "campaña contra el narco", campaña que provocó la militarización del territorio al sur del río Bravo y cientos de miles de muertos y desaparecidos.
Y no es lo único imperialista llevado a cabo e impulsado por esta extraordinaria mujer, Clinton también se sumó a la "cruzada contra el terrorismo" después de la masacre de Orlando, promoviendo la profundización de la intervención imperialista en Siria e Irak. Y sumamos su voto a favor de la Guerra de Irak en el Senado, y el hecho de que proporcionase cobertura diplomática para el golpe militar de derechas que derrocó al presidente Manuel Zelaya en Honduras (y desde entonces Honduras se ha convertido en uno de los países con más asesinatos en el mundo). Y volvemos a sumar el famoso caso de Libia, teniendo en cuenta que fue una parte crucial para el enderrocamiento de Gaddafi con el típico argumento de protección (por cierto, ¿alguien la ha visto durante estos últimos días hablando de la protección que necesitan los migrantes subsaharianos secuestrados en Libia en condiciones de esclavitud?).
Clinton también es una extraordinaria mujer progresista, con medidas sociales a años luz de la URSS como por ejemplo unirse a los conservadores religiosos para aprobar que quemar la bandera estadounidense fuese un crimen federal.
No sé exactamente que referente podría coger una niña de una mujer como Clinton, ¿que era candidata a la presidencia de Estados Unidos? ¿Que podría haber sido la primera mujer presidenta de EEUU? Sinceramente, creo que comentarle a una niña que no todo lo que haga x mujer no está bien por el hecho de ser mujer es una lección más valiosa. Explicarle a una niña que al igual que existen hombres xenófobos, clasistas e imperialistas, existen mujeres xenófobas, clasistas e imperialistas es una lección más importante que pintarle que las mujeres tenemos que ser alabadas por todo lo que hacemos, aunque lo que hagamos perjudique a terceros. Porque simbólicamente había una diferencia entre Clinton y Trump, pero en la praxis... ¿Qué diferencia había entre un candidato neoconservador e imperialista a una candidata neoliberal e imperialista?
Y ahora pasamos a la segunda de abordo, pero no menos importante. La extraordinaria, la más rebelde, la maravillosa: Margaret Thatcher.
Si el hecho de que pusiesen a Clinton como modelo a seguir es una barbaridad y realmente hizo que me desinteresara por el libro, que pusiesen a Margaret Thatcher fue la gota que colmó el vaso. Y sinceramente, me parece de tener muy poca vergüenza poner a una mujer como Thatcher como modelo a seguir para un grupo de niñas de unos 7-13 años (bueno, me parece una vergüenza que se ponga a Thatcher como modelo a seguir a cualquier persona independientemente la edad).
Thatcher, esa mujer que lapidó y esclavizó al movimiento obrero inglés. Justamente uno de los sucesos que más marcaron los 11 años de mandato de Margaret Thatcher fue la huelga de mineros de marzo de 1984 en Brampton, un reducto de izquierdas obrero en South Yorkshire. La empresa nacional anunció el cierre de la mina de Cortonwood, pero los obreros no se creyeron las promesas de recolocación del gobierno y se declararon en huelga. Ante dicha huelga los trabajadores de Yorkshire, Escocia, Gales del Sur, Kent, Durham y Northumberland se unieron a la huelga. Este conflicto se describió incluso como la disputa industrial más amarga de la historia británica. Más de 142.000 obreros se sumaron a la huelga (el paro llegó al 99% de participación en zonas como Gales) y la cantidad de días perdidos por persona-día fueron unos 26 millones.
Aunque la huelga de 1984 fue la más violenta del siglo XX los piquetes fueron no violentos, mientras que los testimonios de violencia contra los huelguistas se reportaron desde el principio. Las propiedades, familias y mascotas de los huelguistas fueron también atacados e incluso el secretario de North Wales, Ted McKay, denunció vandalismo, amenazas de muerte y amenazas de secuestro a sus hijos.
A todo esto, la huelga finalmente fue derrotada y supuso un debilitamiento significativo del movimiento sindical británico y permitió a Thatcher consolidar su programa económico neoliberal. El número de huelgas descendió bruscamente en 1985 a causa del "efecto de demostración" y el poder de los sindicatos obreros disminuyó. Cabe destacar que hubo tres víctimas mortales durante la huelga.
Esa mujer responsable del enfrentamiento militar contra los argentinos por las Maldivas, que causó la muerte de más de 600 argentinos.
Esa mujer que privatizó un gran número de empresas estatales, incluidas la educación y los medios de ayuda social. Solo durante 1979 y 1983 privatizó el 20% del sector público británico, con empresas como la British Gas, la British Telecom y la distribución de las aguas.
Esa mujer que defendió la discriminación política y religiosa en Irlanda del Norte, reglamentando a parte la censura política e institucionalizando la colisión entre las fuerzas represivas británicas y los escuadrones de la muerte unionistas. Sus decisiones políticas radicalizaron las divisiones sectarias, otorgaron poderes militares a las fuerzas de seguridad y vulneraron los derechos humanos fundamentales. A Thatcher en Irlanda se la recuerda con muy mal sabor de boca, sobre todo por el famoso caso del penoso papel que jugó en las huelgas de hambre de 1980 y 1981 al afrontar dicho conflicto "dura como una roca".
Esa mujer que se opuso a los derechos LGBT y presentó la sección 28, que prohibía a las escuelas, bibliotecas y otros organismos públicos "promocionar la homosexualidad".
Y me gustaría remarcar el hecho de que Thatcher pidió públicamente la ejecución de Nelson Mandela, acusándole de ser un terrorista que merecía morir.
Y me gustaría remarcar el hecho de que Thatcher pidió públicamente la ejecución de Nelson Mandela, acusándole de ser un terrorista que merecía morir.
La influencia de Thatcher ha seguido hasta nuestros días en la vida política y económica de el Reino Unido. La mayoría de partidos británicos apoyan a día de hoy la legislación sindical, las privatizaciones y el mercado libre que implantó Thatcher en los 80. Realmente no hay ningún partido mayoritario en el Reino Unido, actualmente, que esté comprometido en revertir las reformas económicas de Thatcher.
¿Ese es realmente el ejemplo que se les quiere dar a las niñas?
¿El ejemplo de una mujer que se posicionó totalmente en contra de todas las medidas sociales que pudiesen ayudar al proletariado inglés y a los pobres? ¿Una mujer que privatizó todo lo que pudo? ¿Que fue apodada como "Dama de Hierro" por su oposición férrea al comunismo? ¿Que mantuvo posiciones imperialistas ante los conflictos contemporáneos en Oriente Medio, África y América Latina?
Vuelvo a repetir lo dicho con Hillary Clinton, ¿es que es por ser mujer que se le tiene que aplaudir todo lo que hizo?
A todo esto, no quiero desvalorizar el libro, es verdad que tiene a grandes referentes como ya he dicho. Tiene a Frida Kahlo (aunque no es de extrañar que se invisibilice su ideología marxista), a Ada Lovelace (primera programadora de la historia), Serena Williams, Hipatia de Alejandría (filósofa y maestra griega), Jacquotte Delahaye (una de las pocas piratas mujeres), Malala Yousafzai (activista pakistaní y Premio Nobel de la Paz)... Me habría gustado tener un libro como este de niña, pero personalmente creo que hay algunas mujeres que no deberían estar en dicho libro ya que no me parecen buenos referentes para las niñas. Y de la misma manera que digo que hay determinadas mujeres que no son referentes, remarco que he echado de menos al ojearlo a otras muchas mujeres que me parecen mucho mejor ejemplo para niñas que quieren encontrar en este libro una figura femenina a la que seguir.
Mujeres como Alexandra Kollontai (revolucionaria comunista rusa), Rosa Luxemburg (teórica marxista), Simone de Beauvoir (filósofa francesa y defensora de los derechos humanos y feminista), Olympe de Gouges (filósofa política francesa, autora de la Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana), Mary Wollstonecraft (escritora y filósofa inglesa, autora de Vindicacón de los derechos de la mujer), Lyudmila Pavlichenko (francotiradora del Ejército Rojo en el Frente Oriental en la II Guerra Mundial), Flora Tristán (escritora y pensadora socialista y una de las grandes fundadoras del feminismo moderno), Clara Zetkin (política comunista alemana), Valentina Tereshkova (primera mujer, y a la vez primera civil, que ha volado al espacio)... E incluso teniendo en cuenta que aunque es un libro de dos escritoras italianas hay mujeres de todos los rincones del mundo, he echado mucho de menos alguna pequeña mención a mujeres importantes españolas como Victoria Kent (abogada y política republicana), Clara Campoamor (política republicana), Dolores Ibarruri (política comunista y dirigente del PCE), Marina Ginestà (miliciana comunista) o Neus Català (miembro de las juventudes del PSUC y única superviviente catalana del campo de concentración nazi de Ravensbrück).